La crisis sanitaria, social y económica que estamos viviendo nos plantea un verdadero reto en la gestión de incertidumbre ya que aprender a transitar en la inestabilidad.
En esta actualidad muchas cosas escapan de nuestro control pero cómo abordemos este desafio será clave para no llegar a agotarnos emocionalmente.
Independientemente de cómo sea nuestra situación siempre podremos contar con nosotros mismos pudiendo elegir qué actitud tomar frente a las situaciones desafiantes.
Aprender a tolerar la incertidumbre nos hace más adaptativos y resilientes. Superar las crisis de forma funcional conlleva nuevos aprendizajes que siempre terminan dando valores agregados a nuestra vida.